diumenge, 29 de juny del 2008

XXI Missa d'en Roger

Roger estaba apunto de empezar el sermón del domingo cuando sonaron las campanas de la Santa Catedral de Lleida

DING, DONG, DING, DONG

El cura tomó aire y empezó;

Bienvenidos a la Casa del Señor, queridos Hijos.
Hoy os hablaré sobre la avaricia, sobre las ansias de poder de algunos, que tienen su alma corrompida y se convierten en servios del Maligno.

Éste tipo de gente miente, engaña, difama, calumnia contra personas nobles y honradas, para arrebatarles lo que justa y honradamente consiguieron al largo de su vida, mediante el trabajo y el sacrificio, para así aumentar su poder.
Hijos, la gente poseída por la Criatura sin nombre está por todas partes, no hay un lujar fijo para ellos, incluso en la iglesia, hijos, incluso entre los hombres de fe que sirven al señor y guían a los fieles, también hay gente avariciosa y dispuesta a hacer lo que sea para tener más soberanía y hacerse con más posesiones, alimentando y haciendo crecer cada vez más su ego, llegando a un punto de egoísmo sin igual y de putefracción del alma por alcanzar lo que nunca pudieron conseguir con sus propios medios, los de la honradez y el trabajo.

Tiempos nuevos se avecinan en Lleida, en la diócesis de Lleida. Los honorables miembros de la curia han nombrado a Mon Senyor Tanys Obispo de la diócesis de Lleida, substituyendo así a Aparicio, cuyo había sido el Obispo hasta el momento y después de la muerte de el estimado y siempre recordado, el Señor Juanva.

Así pues, hijos, seguid el camino de la verdad y de la justicia, seguid el camino del trabajo y del sacrificio, por que es así de la única manera que podréis conseguir los objetivos que os propongáis. No caigáis en la tentación del Maligno, siempre debéis de ir por el camino del Señor, y no dejaros llevar por aquellos que os inciten a hacer el mal y os inviten ha cometer actos impuros e impropios de un verdadero fiel aristotélico.

"El primer pecado así involuntariamente fue descubierto por los humanos. Llevó más tarde el nombre de acedia. Ésta consistía en desviar del amor divino, en abandonarse a la vida material descuidando la vida espiritual, en preocuparse del momento sin guardar al espíritu eso por qué Dios los había concebido. Iba a traer a los otros pecados, conduciendo así los humanos a su pérdida. Alcanzó su cima cuando el domingo ya no estuvo ocupado al rezo, sino a la pereza."

Y para terminar, queridos hijos, recemos todos juntos;

"Creo en Dios, el Altísimo todopoderoso,
Creador del Cielo y de la Tierra,
de los Infiernos y del Paraíso,
Juez de nuestra alma en la hora de la muerte.

Y en Aristóteles, su profeta,
El hijo de Nicómaco y Faestis,
enviado para enseñar la sabiduría
y las leyes divinas del Universo a los hombres perdidos.

Creo también en Christos,
Nacido de María y Giosep.
Dedicó su vida para mostrarnos el camino del Paraíso.
Por ello después de haber sufrido con Pilatos,
Morir como martir para salvarnos.
Alcanzó el Sol donde lo esperaba Aristóteles a la derecha del Altísimo.

Creo en la Acción Divina;
En la Santa Iglesia Aristotélica Romana, única e Indivisible;
En la comunión de los Santos;
En el perdón de los pecados
en la Vida Eterna.
"



Amén.

Hijos, os espero el próximo domingo. Hasta el momento, que Dios Nuestro Señor os guarde de las fauces del Maligno y os guíe por el buen camino.